El hecho ocurrió el martes de la semana pasada pero recién se conoció este jueves. Según comentó Natalia Mudrik, viuda de Carlos Bueno, el día de su muerte, el propietario de la fábrica de hielo "San Remo", había recibido boletas que rozaban los 50 mil pesos. Con la ayuda de la Policía, su esposa pudo abrir la fábrica y se enctontró con su marido descomepensado, con la boleta de luz en la mano. Fue trasladado al Hospital 4 de Junio y luego a la Clínica Avenida, donde falleció horas más tarde.
“Lo encontramos tirado al lado de la cama con las facturas de luz en la mano, casi sin vida. El ataque fue fulminante. No quiero culpar a nadie pero es así”, dijo la mujer en declaraciones. La viuda consideró que “la impotencia y los nervios al ver sumas tan elevadas en las boletas de luz le hicieron subir la presión y también el azúcar, porque él era hipertenso y diabético”.
Cómo fue
Mudrik explicó que "todo sucedió el pasado martes 11 cuando en viaje de regreso desde Machagai hacia Sáenz Peña, en el camino llamé a Carlos pero no me contestaba el celular. Me preocupé bastante y seguí llamando sin obtener respuesta”.
“Al llegar a Sáenz Peña fui directamente a la fábrica que está en colectora sur del Barrio San Cayetano y la puerta estaba cerrada con llave del lado de adentro. Justo vino un encargado y pensando que algo le había pasado llamamos a la Policía. Con los efectivos en el lugar se pudo finalmente abrir la puerta”, contó.
“Al ingresar a la habitación que Carlos tiene en la fábrica, vimos que estaba tirado al lado de la cama con un ataque de presión fulminante, tenía las facturas de la luz en la mano y aún así algo me alcanzó a balbucear con respecto a las boletas de la luz, habló de la hija y me dijo que cuide la fábrica”, confirmó la mujer.
Mudrik recordó que su marido “renegó demasiado, se puso muy nervioso y seguramente se vio invadido por la angustia, por la desesperación de no saber cómo afrontar el incremento de las tarifas de luz. No hay dudas que el detonante del ataque que lo llevó a la muerte fueron los montos excesivamente elevados de las facturas de luz. De pagar 3.000 pesos pasamos a pagar 17 mil, después 19 mil, y él en la mano tenía dos facturas, una mayor a 20 mil y otra superior a 28.000 pesos", indicó la mujer.
Crisis
Otra cuestión que habría profundizado la angustia del empresario PyMe fue la mala situación que atravesaba su negocio. “La fábrica produce y vende solamente hielo, y Carlos que ya venía con algunos problemas de salud la peleó como pudo porque las ventas están bastantes bajas”, dijo la viuda.
“Tenemos 26 años en el rubro del hielo y Carlos murió a los 62 años, tenía grandes proyectos para crear fuentes de trabajo en nuestra ciudad. Creo que el gobierno debería darle una mano a las PYME y no tener que llegar a esta situaciones. Ahora a los empleados los voy rotando hasta que nos podamos acomodar nuevamente porque la verdad que esto me superó. Él era un poco descuidado con las boletas y cuando las pagaba a veces las guardaba, a veces no se donde las dejaba pero la deuda total de luz de la fábrica hoy es de 89.000 pesos. Tengo toda la intención de pagar esa deuda, soy una jubilada pero si tengo que sacar un crédito lo voy a hacer, porque no pienso cerrar y dejar a la gente en la calle", aseguró.
Fuente: Periodismo365
Comentarios
Publicar un comentario